diario del candidato 8 de noviembre

A mí no me defraudaron; fue un debate justo como me lo imaginaba, ni Rajoy ni Rubalcaba, ninguno está a la altura de las circunstancias. El “huno” (parece el jefe de una banda, por eso va con “h”), Rubalcaba, que intentó atosigar a preguntas y poner nervioso al “otro”, Rajoy, que parecía salido de la película de Amenábar por la cantidad de maquillaje y una sonrisilla que daba grima, la verdad.

Lo verdadero es que ninguno dejó claro qué iba a hacer para sacar a España de la crisis y para generar empleos que, a la postre, es lo más importante. Rubalcaba lo intentó, insistió y lanzó dardos envenenados a su rival, intentando convencer de sus soluciones, pero ya no es creíble, pertenece a un equipo perdedor y si tanto sabían ¿por qué no lo han hecho hasta ahora?. Por su parte, el pepero va a ser el próximo presidente del Gobierno a su pesar, las fichas que llevaba no parecía que le dieran soluciones a los atropellos de su rival.

Cada cual hizo el papel que se le había reservado, Rubalcaba hacía de challeguer, quien aspira a un cargo sin estar en poder de él, y Rajoy, a quien le tocaba también hacer de challenguer, que lo es, hizo de incumbent; como si él fuera ya el presidente y quien tuviera que atacar fuera su rival, ni lo uno ni lo otro. Para mí fue un fiasco de los que hacen época, esa es al clase política que tenemos y esos son sus máximos representantes. no creo que las decenas de medios extranjeros que se dieron cita sacaran provecho de la charla, que no debate. Campo Vidal de convidado de piedra. Creo que ambos candidatos fueron a  su pesar.
Rubalcaba fue muy didáctico, con mala leche, y parecía un profesor dando clase en la Facultad a sus alumnos, pero se equivocó de escenario, esperábamos mucho más de él y se fue desinflando según pasaban los minutos. Rajoy por su parte parecía sentado en un pedestal y respondía a su rival con datos; la estrategia no es mala, ocurre que alguno de los datos estuvieron sesgados, o lo fueron aposta, para rebatir lo que Rubalcaba decía.

Si tuviera que ponerle una nota al debate sería un “4”, “ni chicha ni limoná, ná de ná”. Un fiasco al que, desgraciadamente, no es están acostumbrando nuestros políticos. Es lo que hay y lo que nos va a quedar. Mi predicción es que la crisis se va a llevar por delante al PSOE pero en los próximos cuatro años se llevará por delante al PP, al tiempo. ninguno sabe qué hay que hacer y dejan a la suerte lo que ocurrirá en la economía de la eurozona en los próximos meses. Lo de Rubalcaba de pedir una aplazamiento a la UE para poner en marcha medidas económicas no cuela y además no va a ser el próximo presidente del Gobierno.

Considero, y es mi opinión muy personal, que España necesita un gobierno de coalición entre los grandes partidos, ponerse codo con codo a exprimir al máximo las ideas para sacar al país del atolladero al que unos y otros le han llevado. Y los culpables que paguen por ello ya sean bancos, políticos o especuladores.

¿Y qué significa todo esto para los malagueños?, pues si queréis la verdad, muy poco, más bien nada. Visto la calidad de los jefes imaginaos a los subordinados. Málaga merece otra clase política que luche sólo por sus intereses.

Votar al PSOE o el PP, para cualquier malagueño, es algo así como tirar el voto. En ACIMA xMALAGA sí sabemos lo que tenemos que hacer y es, sencillamente, trabajar por nosotros y para nosotros; nadie nos va a ayudar si nosotros no lo intentamos, por nuestra cuenta.

Francisco Roldán, candidato de ACIMA xMALAGA al congreso de los Diputados